Evitar el desperdicio de alimentos a gran escala ya es una realidad en Chile y Hugo Erazo, Old Georgian Generación ‘89, junto a su empresa Innobyte, son los responsables de la plataforma tecnológica que lo hace más eficiente. Acá nos cuenta todo sobre Red de Alimentos, una organización sin fines de lucro comprometida con el rescate de alimentos y artículos de primera necesidad en buen estado y que pueden entregarse a quienes más los necesitan.
Las tecnologías de la información agilizan procesos en materias tan diversas como educación, investigación científica, seguridad, transporte, comercio y también a la hora de ayudar a personas que viven en condición de vulnerabilidad. Un ejemplo de esto último es la Corporación Red de Alimentos, que en 2010 creó el primer banco de alimentos de Chile con un modelo sostenible de triple impacto: social, económico y medioambiental. Esta ONG recupera alimentos y artículos de primera necesidad desde diversas empresas y los distribuye entre población en situación de vulnerabilidad o de escasos recursos, a través de más de 300 organizaciones sociales.
Fue en 2017 cuando nuestro compañero Hugo Erazo, gerente general, junto a todo el equipo de Innobyte, comenzaron a trabajar en el desarrollo de una nueva plataforma tecnológica para Red de Alimentos. El objetivo fue hacer más eficiente y trazable el proceso de unir a empresas y organizaciones sociales para rescatar alimentos, pañales y productos de higiene personal aptos para el consumo humano, para que sean distribuidos entre quienes más los necesitan.
“Este es el proyecto más bonito, el que más he disfrutado desarrollar”, cuenta Hugo. “En 2017 Red de Alimentos fue la ONG ganadora en Chile y finalista regional del ‘Desafío Google.org’ que se realizó en 5 países y en los que participaron más de 2.300 proyectos de innovación social. Su proyecto buscaba desarrollar una aplicación que conectara en tiempo real a empresas que tienen productos para entregar con las organizaciones sociales que los requieren en forma eficiente, sustentable, trazable y escalable”.
Innobyte fue el proveedor seleccionado para desarrollar esta plataforma, generando un enorme impacto: “Un proceso que tomaba 5 horas diarias, como la asignación de productos a las organizaciones sociales socias de la Red, hoy se resuelve en un par de minutos. Los tiempos de espera también se redujeron considerablemente y una organización ya puede retirar los productos asignados en una fracción del tiempo que les tomaba anteriormente. Además, este sistema permite recuperar productos en cualquier lugar del país, sin necesidad de que exista un centro de distribución de la Red en la zona, ya que detecta los productos que las empresas quieren entregar y los asigna a alguna organización social beneficiaria que esté geográficamente cerca, para que los retire directamente en las dependencias de la empresa”, explica Hugo.
¿Cómo funciona el sistema?
Hugo nos explica con un ejemplo concreto: “imaginemos que un supermercado de una comuna X avisa que tiene dos cajas de productos en condiciones de ser entregadas. En ese caso, las organizaciones que se encuentren a menos de tres kilómetros a la redonda reciben una alerta. La primera que pida esas cajas se las adjudica y puede ir directo a buscarlas al supermercado. No hay necesidad de ir a la bodega de Red de Alimentos”, agrega.
La plataforma considera una gran cantidad de variables y factores para hacer más eficiente y seguro el proceso. Una vez que detecta que una empresa tiene productos para entregar, comienza una búsqueda recursiva y georeferenciada de las organizaciones sociales beneficiarias que están cerca. Para cada una de ellas, calcula si tiene la capacidad de consumo para los productos ofrecidos, según la cantidad de beneficiarios de la organización social, cuántas comidas requieren, sus rangos etarios y las entregas que se le hayan hecho con anterioridad, información que el sistema contrasta con el tipo de productos ofrecido y su duración antes de la fecha de vencimiento. Si las organizaciones tienes la capacidad de consumo, se les envía una alerta para que ellas revisen los productos, los acepten y retiren directamente en las dependencias de la empresa.
El mismo proceso sigue con los productos que Red de Alimentos rescata y que llegan hasta su centro de distribución ubicado en San Bernardo, donde las organizaciones sociales reciben una oferta customizada a las necesidades nutricionales de sus beneficiarios.
El desafío de la pandemia
Sin embargo, fue la irrupción del coronavirus que obligó a perfeccionar la plataforma. “Red de Alimentos hizo diversas campañas de recaudación de fondos y recibió donaciones para entregar una gran cantidad de kits de alimentación a familias con dificultades derivadas del confinamiento. Entonces, se abrió un desafío mayor para ordenar y trazar esas entregas con la ayuda de voluntarios, por lo que desarrollamos una nueva aplicación ad-honorem para resolver este problema. En nuestra reunión de equipo la tarde en que nos enteramos, le contamos a todos acerca del nuevo requerimiento de la Red, pusimos en contexto la importancia y urgencia de solucionar el problema. Por unanimidad todos votamos a favor de desarrollarlo y coincidimos en no cobrarlo. Los siguientes días fueron una locura, les avisamos a todos nuestros clientes que estaríamos ocupados en esto, y cada uno de nosotros dejó lo que estaba haciendo y se puso al servicio de este proyecto", cuenta Hugo.
El equipo de Innobyte estuvo de cabeza diseñando e implementando esta aplicación, motivados para que la ayuda, en estos tiempos de pandemia, llegara a destino. “Trabajamos a tiempo completo, incluso fines de semana, y en 10 días logramos terminar el desarrollo y probarlo con Red de Alimentos y sus voluntarios”, comenta Hugo, quien destaca la posibilidad de hacer trazabilidad de los kits desde la bodega hasta la recepción final, ayudando a los voluntarios con la entrega y dejando todo registrado asegurando que éstas lleguen a quien corresponde”.
Los próximos desafíos
“El siguiente paso es incluir a empresas de menor tamaño, donde los volúmenes que se pueden recuperar requieran un proceso logístico simple. Un ejemplo de lo anterior es un local de una franquicia mediana que también tenga stock remanente”, explica. “También hay un desafío en orden a comunicar más esta hermosa iniciativa”.
Según explica Hugo, “el sistema fue diseñado para que todas las empresas puedan unirse a Red de Alimentos independiente de su tamaño. Se necesita que sigan ingresando cada vez más actores y contribuyan a esta importante causa”.
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